GRAN TEATRE DEL LICEU
El Gran Teatre del Liceu fue construido en la Rambla por las clases acomodadas de Barcelona en el solar de un antiguo convento. Fue diseñado para albergar el Conservatorio de Música y con el objetivo principal de crear un lugar donde la alta sociedad pudiera acudir a ver la ópera, la atracción cultural estrella de la época. El Liceu pronto se convirtió en un referente de Barcelona, hasta tal punto que su destrucción por el incendio de 1994 conmocionó a la sociedad catalana. El proyecto de reconstrucción dotó al edificio del Liceu de unas instalaciones técnicas y un equipamiento escénico muy avanzados, y restauró fielmente el esplendor original de uno de los teatros de ópera más conocidos. El auditorio de cinco niveles tiene capacidad para 2.292 personas, lo que convierte al Gran Teatre del Liceu en la Rambla de Barcelona en uno de los teatros de ópera más grandes del mundo. La temporada de ópera, danza y música va de septiembre a julio. Como símbolo de cultura y distinción en la ciudad, el Liceu ofrece una programación que incluye clásicos eternos como Verdi, Mozart y Wagner junto a nuevos y originales conceptos. El Liceu también está cada vez más comprometido con la educación en Cataluña y ha establecido el Petit Liceu, un programa de música y artes diseñado para ayudar a los niños pequeños a desarrollar sus sensibilidades musicales y creativas desde una edad temprana. El Gran Teatre del Liceu también cuenta con una Obra Social que promueve y ejecuta actividades que revierten en la promoción y potenciación de la cultura en general y más concretamente de la ópera.